También soy un eneatipo 1 del Eneagrama, en mejora continua.
Además, no tengo mano izquierda, el día que dieron esa asignatura, hice “pellas”.
Cada vez me apasiona más mi trabajo y conectarme con distintas personas de distintos lugares.
También sigo hablando cada día con mi madre, recordándola, pidiéndole consejo y protección. La sigo admirando por su valencia, buen humor y por todo el amor que siempre me ha dado y por confiar tanto en mí.
Siempre me sigue sorprendiendo que me digan “como me has ayudado” con respecto a mi trabajo.
Amo la vida y me gusta vivirla.
Finalmente, parece que me como el mundo, pero soy sensiblona (que no sensiblera), cariñosa, leal y muy frágil.